Dejar de fumar es beneficioso por muchas cosas, pero en relación con las enfermedades periodontales que comentamos esta semana, mucho más:
La influencia del tabaco en las encías va más allá del hecho, bien conocido, de que el tabaco mancha los dientes y produce un característico mal aliento. El tabaco determina, en parte, el estado de sus encías y condiciona negativamente el resultado del tratamiento periodontal.
Los estudios sobre población indican que los fumadores, y especialmente de grandes cantidades, tienen una clara tendencia a la enfermedad periodontal.
¿Por qué?Los productos derivados de la combustión del tabaco y el efecto general desencadenado por los productos tóxicos del tabaco sobre el organismo hacen que la encía reciba un menor aporte sanguíneo y de oxígeno, a la vez que disminuyen sus mecanismos defensivos contra las bacterias de placa bacteriana.
Dejar de fumar beneficia su salud periodontal.
- Uno de los signos que nos avisan de una posible enfermedad periodontal, el sangrado de encías, se inhibe en gran parte con el tabaco: el que la encía no sangre, aun estando muy afectada, es fruto de un menor aporte sanguíneo y de oxígeno como consecuencia de fumar.
- Si estas tratando una enfermedad periodontal y fumas, la eficacia del tratamiento es menor. Numerosos estudios han demostrado que la respuesta a corto y largo plazo es peor en las personas que fuman, hasta el extremo de que ciertas técnicas complejas de tratamiento no siempre se aconsejan en personas fumadoras, por los resultados claramente peores.
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